Cómo preparar oralmente una ponencia

Cuando preparamos una presentación importante, el primer paso es redactar el contenido y evitar improvisar el guion en función de la diapositiva. Las diapositivas se preparan una vez que hemos escrito el guion. 

Todos los participantes que han asistido a mis cursos tienen un alto grado de nerviosismo, y al mismo tiempo pensaban que en esta situación de alta carga emocional podían improvisar el contenido y a la misma vez conectar con el público.

El peligro más grande de la improvisación es enrollarse, hacer frases largas y enfocarse únicamente en el “¿Qué quiero decir?”, perdiendo el control del lenguaje corporal y verbal, que es el “¿Cómo lo digo?”.

El público percibe inmediatamente que el orador está más preocupado por el contenido que por la conexión con sus interlocutores. Dominar el tema no es la garantía de transmitirlo bien. Si el orador es un especialista del tema que comenta, debe hacer el esfuerzo de sintetizar lo que dice para mantener la concentración del público.

En comunicación oral es fundamental evitar explicaciones largas y enrollarse demasiado, y es el defecto más común en las reuniones.

Consejo 1:

Cuando redactamos la ponencia aconsejo hacer un plan previo:

• Determinar el objetivo de la reunión
• Plantear el contexto actual en 3 frases
• Determinar las 4 o 5 ideas claves que el público debe conocer
• Resumir los puntos principales de la presentación
• Concluir

Consejo 2:

Nuestra manera de pensar está muy enfocada en el “¿Por qué?”, eso provoca presentaciones muy explicativas y largas. Los americanos, ingleses o japoneses están más enfocados en el “¿Cómo? “es decir la solución y la acción. El “Por qué” conlleva el riesgo de mucha justificación.

Consejo 3:

• Hacer frases cortas (una idea por frase)
• Utilizar preguntas retóricas que dan ritmo a la presentación y permiten ir al grano
• Ejemplos de preguntas: Cómo, Qué, Para qué, Cuándo….
• Prever frases emocionales de convicción, motivación y acción
• Arrancar la ponencia con palabras que te gusten y fáciles de vocalizar
• Evitar la sucesión de palabras difíciles de vocalizar o muy largas

Consejo 4:

El hecho de redactar nos da la posibilidad de utilizar signos mnemotécnicos como:

• Marcar las pausas largas y cortas
• Marcar las palabras claves que vamos a entonar
• Dibujar una sonrisa con las palabras “Buenos días”
• Dibujar dos piernas para recordar el buen anclaje corporal.

Consejo 5

• Si el orador disfruta de su ponencia, el público lo va a disfrutar también
• El objetivo principal de una ponencia es llegar al público y mantener su interés
• Para disfrutar de una ponencia es importante redactarla para corregirla, adaptarla al estilo oral y hablar con más seguridad.
• Las diapositivas no son un guion o un informe, tienen que provocar la necesidad de escuchar al orador para entenderlas